Eres

Hace tiempo que no me escribo y no es que me haya olvidado de mí, que siempre me tengo presente, en todos mis sueños, en todas mis ilusiones y en todos mis fracasos.

Tú, que te escondes en ese universo onírico en el que te encierras teniendo conversaciones a medias contigo misma, conversaciones que podrías tener con más personas pero jamás tendrás por miedo a enfrentarte a la gente o simplemente por miedo a enfrentarte a ti misma.

Tienes miedo de expresar lo que sientes o simplemente de expresar lo que piensas y ese miedo irracional se ha quedado incrustado en tu piel en forma de vulnerabilidad y con ella ha forjado una coraza de hierro impenetrable que solo tu misma puedes destruir.

Siempre te has creído inferior y no lo puedo entender, porque yo he oído de cerca todos esos monólogos qué has tenido contigo misma, esas conversaciones tan interesantes que jamás saldrán a la luz y se quedarán dentro de ti explotando en tus entrañas, dejando pequeñas partículas, diminutas pero muy afiladas que dejan heridas difíciles de curar.

No sé bien que es lo que te diría si esta carta la hubiera escrito en el pasado, pero mírate ahora, jamás pensaste que podrías conseguirlo. Sé que tenemos mucho camino por recorrer, muchos miedos por resolver, pero no huyas, no vuelvas a alimentar al miedo, alimenta tus sueños, borra el tiempo perdido y recuerda que ERES y eso es mucho más de lo que crees.

Sigue así, ya casi lo tienes. 




No me vale

 No, no me vale

No me vale creer que he llegado tarde a todo 

No me vale seguir legrando la herrumbre de mis huesos 

Intentar desbrozar lo que creí que eran obstáculos 

No me vale engullir más benevolencia renga 

No me vale 

No me vale esa ingesta de palabras incoherentes para vomitarlas después en océanos de tinta 

No me vale ya ser la niña buena y tonta que se queda al final de la fila 

No, no me vale 

No me vale seguir en ese lodazal filosófico que me arrastra 

Daré la vuelta a mi reloj de arena 

Nadaré en la clepsidra 

hasta conseguir que el tiempo se rompa y caiga en pedazos 

bajo mis pies 

Inexorable 

hasta la extenuación 




Todas ellas

Siempre he creído saber quién soy 

Pero en realidad no sé bien si soy la persona que era antes

Quizá soy el reflejo de lo que fui

O simplemente una diminuta partícula de lo que pude ser

O la gran promesa de ese jamás seré 

Tal vez sea todas y cada una de ellas 

La que rechaza su reflejo del espejo 

La que se queda con la palabra en la boca y se las traga y después las vomita a escondidas 

Puede que sea una parte de aquella que baila descalza y desnuda cuando nadie la mira 

O tal vez sea la que llora por todo o la que ríe sin motivo 

O esa niña atrapada en el cuerpo de una mujer adulta 

Seguro que habrá una parte de esa que tiene miedo a todo 

La que tira sus sueños por la borda y después iza la bandera de no me rindo 

Y aunque no quiera

también esa que quiso ser todo y al final no fue nada

La que tiraron de rodillas y se levantó de nuevo 

No sé si algún día sabré qué parte de todas ellas soy 

O en qué momento soy cada una de ellas

De lo que si estoy segura es de que soy todas y cada una de ellas 

Y cada momento vivido 

han hecho quien soy 

Qué más da la que aparezca 





Aprendiendo lo desaprendido

Estoy dejando de buscar respuestas absurdas en ese viejo baúl carcomido de culpas y desastres.  Estoy dejando la culpa atrás, mientras camin...