Hasta que anochezca

Apareces cuando menos lo espero.

Cuando pensé que ya no volverías.

Sigilosamente, te acercas y vas construyendo tu castillo, que es mi celda.

Mientras, arañas mi piel con los restos de tus escombros.

Cartografía del silencio

En qué parte de mi hemisferio coloco el silencio, porque quizá ninguna de las dos partes esté ya conectada y nuestros recuerdos yacen perdid...